Anuncios
Los patrones de sueño saludables son importantes para las personas de cualquier edad. Sin embargo, cuando se trata de niños, inculcarles los hábitos correctos desde el principio puede ahorrarles a ellos y a ti toda una serie de problemas futuros. El sueño es de vital importancia para todos nosotros, pero lo es particularmente para los bebés y niños en crecimiento. Asegurarse de que sus hijos duerman lo que necesitan es una parte extremadamente importante de la crianza.
Dormir es una de las actividades más importantes y agradables de la vida humana. Despertarse sintiéndose renovado hace que todo el día sea mucho mejor. Es vital para nuestra salud, mental, emocional y física. Los ritmos circadianos están regulados por la luz y la oscuridad, sin embargo estos ritmos en realidad toman tiempo para desarrollarse. Normalmente, a las seis semanas de edad los bebés comienzan a desarrollar estos ciclos de sueño y vigilia.
Anuncios
Se ha demostrado que a la edad de dos años, la mayoría de los niños han pasado más tiempo dormidos que despiertos. La mayoría de los niños pasan alrededor del cuarenta por ciento de su infancia dormidos. Los bebés pasan alrededor del cincuenta por ciento de su tiempo en cada uno de los estados de sueño REM y no REM. Alrededor de los seis meses de edad, el sueño REM representa aproximadamente el treinta por ciento del sueño.
Los recién nacidos duermen en promedio un total de 10 a 18 horas del día. Estos períodos de sueño pueden variar desde sólo unos pocos segundos hasta un número de horas cada vez. El sueño de los recién nacidos está intercalado por su necesidad de ser cambiados, nutridos y alimentados. Pero incluso en esta etapa temprana es esencial desarrollar buenos patrones de sueño.